BEIJING (AP).- Muchos exportadores chinos están teniendo dificultades para lidiar con el aumento a los aranceles ordenado por el presidente Donald Trump. En consecuencia, están subiendo precios o hallando nuevos mercados.
Hacia abajo
El incremento de 25% convertiría en pérdidas las ganancias de Cixin en el mercado estadounidense, el cual representa el 30% de sus exportaciones, de acuerdo con Wang Liqiang, gerente de la empresa en la ciudad occidental de Ningbo.
"Estamos considerando fabricar tantos rodamientos como podamos para el mercado estadounidense antes de la imposición de aranceles”, dijo Wang. "Podemos hacerlo trabajando tiempo extra”.
Algunas empresas están buscando formas de ocultar su origen chino enviando bienes a través de otros países.
"Tal vez los clientes compren desde Sudamérica y luego Sudamérica le venda a Estados Unidos”, dijo Yvonne Yuan, gerente de ventas de Shenzhen Tianya Lighting Co., un fabricante de focos LED.
Trump dijo que los aranceles a 50 mil millones de dólares en productos chinos buscan castigar a Beijing por robarse tecnología o presionar a las empresas extranjeras a entregarla.
Trump dejó tiempo para negociar. El periodo para hacer comentarios públicos concluye el 11 de mayo y habrá una audiencia el 15 de ese mes.
Pero para los exportadores que dependen del mercado estadounidense, los costos potenciales son alarmantes.
Los fabricantes chinos que suministran insumos a sectores específicos verían una reducción de la demanda y una mayor presión sobre los precios, extendiendo los efectos de los aranceles más profundamente en la economía china.